Médico acusado de disparar en Bayamón alega ser "la verdadera víctima"

El juicio contra el médico Wilfredo Rodríguez Rivera, acusado de dispararle a otro conductor durante un incidente de tránsito el 19 de febrero en la carretera PR-167 de Bayamón, fue confirmado para celebrarse por jurado a finales de agosto, mientras el caso continúa en la fase de descubrimiento de prueba.

Durante una vista de estatus celebrada hoy, martes, en el Tribunal de Primera Instancia de Bayamón, la defensa alegó que Rodríguez actuó en legítima defensa tras ser presuntamente perseguido, acorralado y enfrentado por el perjudicado.

“Mi cliente es la verdadera víctima”, afirmó su abogado, Luis Santiago, quien sostuvo que la evidencia ya entregada —más de 130 piezas entre documentos y grabaciones— respalda esa versión de los hechos.

Según el licenciado Santiago, existen videos que mostrarían cómo el conductor herido brincó una isleta, corrió hacia el médico y lo detuvo físicamente, lo que llevó al galeno a temer por su vida y disparar.

El abogado defensor añadió que esperan aún recibir material audiovisual adicional del Ministerio Público.

Por su parte, el fiscal del caso, Roberto Hernández, reafirmó que la fiscalía se enfocará en demostrar la intención y el estado mental del acusado durante el juicio.

“Él hizo lo que hizo, y la prueba es contundente en cuanto a eso”, declaró el representante del Ministerio Público, quien recalcó que la vista preliminar ya ofreció prueba significativa y que el proceso judicial esclarecerá la intención del imputado.

El incidente, ocurrido en febrero, resultó en heridas de bala en el muslo y costado de la víctima, quien perdió el control del vehículo y chocó contra un pilar. Su perro, que lo acompañaba, fue atropellado tras salir del auto. Rodríguez fue arrestado en la escena y actualmente se encuentra en libertad bajo fianza, enfrentando cargos por tentativa de asesinato y violaciones a la Ley de Armas.

Ambas partes mantienen posturas firmes: mientras la defensa argumenta que el médico reaccionó por miedo genuino, la fiscalía confía en que el juicio probará que hubo intención criminal.