Con una hora y cuarenta minutos de retraso, la comisionada residente Jenniffer González llegó a la escuela intermedia Salvador Brau en Carolina a ejercer su derecho al voto.
Al arribar, pasadas las 12:30 del mediodía, González se mostró confiada en la transparencia del proceso.
De la escuela partió a una misa en la iglesia Santa Bernardita en Country Club y luego, adelantó, irá a almorzar.
A preguntas de los periodistas sobre el incidente con unas camisetas que se reportó horas antes de que se abrieran los colegios electorales, González le restó importancia al asegurar de que fueron solo unos pocos los que la utilizaron por su propia cuenta y no por instrucciones de su equipo de campaña.
González aprovechó la oportunidad para críticar que muchos colegios electorales no contaban con servicio de energía eléctrica ni tampoco tenían diesel para las generadores.
Sobre el caso judicial que presentaron por supuestos problemas relacionados a las primarias, explicó que "lo hice esta semana cuando la comisionada electoral de mi partido sacó a mi funcionaria de mesa para que no velaran y decidió quiénes iban y no iban y acudí al tribunal, y el tribunal determinó que esa persona tenía que estar, y esta semana estará en el escrutinio. Y (la corte) dejó el caso abierto por si hubiera algun tipo de irregularidad o alguna otra situacion, mi equipo electoral está disponible para ir al tribunal en cualquier momento. Esa avenida la tenemos ahí, yo espero no tener que utilizarla, pero yo voy a hacer valer la ley y el reglamento para que se cuente cada voto y la intención del elector".
La precandidata se enfrenta al gobernador Pedro Pierluisi por la candidatura a la gobernación por el Partido Nuevo Progresista.