Alcaldes unidos: Defendiendo nuestro pueblo en Washington y en casa

Desde mi rol como alcalde de Camuy y, honrosamente, como presidente de la Federación de Alcaldes de Puerto Rico, me encuentro en una posición única como parte de la primera línea de servicio para nuestros ciudadanos. Somos nosotros, los alcaldes y alcaldesas, quienes vemos más de cerca las necesidades diarias de nuestra gente y quienes, a menudo, somos los primeros en responder ante cualquier emergencia, en el sentido más amplio de la palabra. Es por ello que el trabajo que realizamos desde la Federación busca levantar cada municipio, no por el hecho de levantar los municipios porque sí, si no para mejorar la vida de cada puertorriqueño.

Con eso en mente, hemos reafirmado el poder de la colaboración. La reunión con nuestro Comisionado Residente, Pablo José Hernández Rivera, fue un diálogo fundamental para delinear acciones concretas que fortalezcan nuestros municipios y amplifiquen los esfuerzos federales a favor de la isla. Discutimos temas tan vitales como el ajuste de los límites de ingresos y valores de renta justa (Fair Market Rents) para maximizar los beneficios del programa Housing Choice Voucher (Sección 8), la agilización de permisos ambientales para proyectos de desarrollo y la defensa de nuestros presupuestos municipales frente a recortes proyectados.

Asimismo, la convocatoria del presidente de la Cámara de Representantes, Carlos "Johnny" Méndez, para reunir a la Federación y a la Asociación de Alcaldes, es fundamental para asegurar la asignación y el manejo eficaz de los fondos que protegen directamente a nuestros pueblos y su gente. Estas gestiones en la legislatura local son vitales para evitar que los municipios enfrenten reducciones que impacten servicios esenciales que sencillamente se tienen que dar, como la seguridad, mantenimiento y Salud.

Nuestros municipios enfrentan necesidades apremiantes que demandan una acción decisiva en múltiples frentes. Algunas requieren intervención federal directa, como acelerar los proyectos de reconstrucción que aún están entrampados en procesos burocráticos y la adaptación de los procesos regulatorios federales a nuestra realidad insular. Otras, sin embargo, exigen esfuerzos estatales concertados, como finiquitar las partidas presupuestarias que impactan directamente los servicios a nivel municipal. En cada una de estas gestiones, lo que ha quedado claro es que la mejor manera de superar nuestros desafíos es mediante el trabajo colaborativo, la innovación y una defensa activa de los intereses de nuestras comunidades ante todos los niveles de gobierno.

Para mejorar la calidad de vida de todos los puertorriqueños, es necesario que, como se dice en inglés, sea "all hands on deck". Necesitamos que todas las ramas de gobierno remen en la misma dirección: la rama ejecutiva, la rama legislativa, los gobiernos municipales y nuestro Comisionado Residente en Washington. Esta colaboración debe ser genuina, incluyendo a —PNPs, Populares, Republicanos y Demócratas— para atender las necesidades apremiantes de quienes nos dieron la confianza de ponernos en nuestras respectivas posiciones. Solo así lograremos la sinergia necesaria para transformar los retos en oportunidades y construir un Puerto Rico más próspero, justo y sano.