Feliz Día del Padre a los que sí quisieron… pero no los dejaron

En este Día de los Padres, hay quienes sonríen, pero también cargan con una herida que no se ve. Hay hombres que hoy tienen hijos a quienes aman profundamente, pero que también sufren la pérdida de un hijo que no está. No porque decidieron abandonarlo, sino porque jamás se les permitió ejercer la paternidad que sí deseaban. Su experiencia fue arrebatada antes de comenzar y su dolor quedó atrapado en un silencio que la cultura se ha empeñado en ignorar.

Existe una herida que raras veces se nombra: la del padre que pierde a su hijo a causa del aborto. En una sociedad que ha hecho del aborto una bandera de empoderamiento, se repite una de las frases más peligrosas de la actualidad: “mi cuerpo, mi decisión”. Esta consigna no solo busca excusar el asesinato de bebés en el vientre, sino que también borra por completo la existencia y relevancia del padre, llevándose de por medio el hecho de que sin su aportación no habría bebé.

Uno de esos padres es Thomas Kearns. Cuando supo que su novia estaba embarazada, su sorpresa pronto se transformó en alegría. Fueron juntos al primer sonograma y allí vio a su hija, Clementine. Escuchó su corazón latir, vio cómo se movía y supo que su vida había cambiado. Aunque su pareja dudaba, Thomas tenía claro que quería tener a su hija. Sin embargo, el 13 de marzo de 2024, Clementine fue abortada a los cinco meses de gestación, sin que él lo supiera. La clínica llevó a cabo el procedimiento a pesar del evidente estado de angustia emocional de la madre y ese día, Thomas no solo perdió a su hija: también le fue negado su derecho a ser padre.

Después del aborto, Kearns descubrió que el cuerpo de Clementine fue desmembrado y utilizado para investigación médica. Desde entonces, lucha por recuperar sus restos para poder enterrarla dignamente. (Live Action News, 2024).

Historias como la de Thomas Kearns no son aisladas. Miles de hombres viven con el dolor de haber perdido a sus hijos sin poder hacer nada para impedirlo. Muchos de ellos hoy son padres amorosos de otros hijos, responsables, presentes y entregados, pero aún arrastran el duelo de aquel hijo que no pudieron proteger. Un duelo que no se borra con nuevas paternidades, sino que convive en el silencio.

A quienes se les arrebató la experiencia de ser padre, aunque hoy sí tengan hijos y se encuentren cargando con un dolor que no saben cómo procesar, no están solos. Camino a Sanar es un grupo de apoyo gratuito para hombres y mujeres que han experimentado el impacto emocional, espiritual y relacional de un aborto provocado. A través de estudios bíblicos, acompañamiento y comunidad, ofrecen un espacio seguro y confidencial donde puede comenzar la sanidad de la herida post aborto. Se les puede encontrar en sus redes sociales: en Instagram como @camino_a_sanar, en Facebook como “Camino a Sanar” y en su página web www.caminoasanar.com. También se puede establecer contacto a través del correo electrónico caminoasanar@todalavidapr.com y el número de teléfono 787-459-6760.

También es paternidad la que se quiso ejercer, la que fue negada y la que sigue viva en el recuerdo y en el corazón. Este Día de los Padres es también para quienes siguen sanando, para quienes cargan con una ausencia que nadie ve y para aquellos que, a pesar del silencio, no han dejado de amar. Que sea un día para honrar el valor de ser padre en todas sus formas, incluso cuando el mundo no lo ha reconocido.

Feliz Día de los Padres. La paternidad sigue siendo digna, valiente y profundamente necesaria.

Cita: Sielicki, Bridget. “His Daughter Died by Abortion at 20 Weeks. Watch His Heartbreaking Story.” Live Action News, 8 Aug. 2024, www.liveaction.org/news/his-daughter-died-abortion-20-weeks-heartbreaking/.