El mejor programa social es un empleo
El Presidente del Senado, Thomas Rivera Schatz, reflexiona sobre por qué el empleo es la política social más poderosa

Hablemos claro, sin rodeos y sobre todo con la verdad. Cuando el gobierno busca erradicar la pobreza, hay una fórmula que supera cualquier otra estrategia: el mejor programa social, el más efectivo, el que verdaderamente transforma vidas, es un empleo. Así lo expresó en una ocasión el Presidente Reagan y es una verdad irrefutable. Cuando hablamos de empleo, hablamos de la oportunidad de trabajar para un tercero, de servir a nuestro pueblo desde el gobierno, de forjar el camino con un negocio propio o de prestar servicios como contratista. Todas son avenidas hacia la prosperidad.
Dice el conocido refrán que "el trabajo es honra." Cuando un puertorriqueño tiene la oportunidad de ganarse el pan con el sudor de su frente, cuando puede aportar a su hogar, a su comunidad y a su propio desarrollo, es cuando ejerce plenamente su autonomía, su propósito, el valor y la satisfacción de ser productivo. Un empleo no genera solo un salario; es una base sobre la cual se fortalece la autoestima, se construye la independencia económica del individuo y se cultiva la capacidad de soñar, crecer, prosperar. Es un pilar de una familia fuerte y de una sociedad pujante.
Se habla mucho, y con razón, de la necesidad de apoyar a los más vulnerables, y eso es un deber ineludible. Ahora bien, la verdadera prosperidad duradera, llega cuando creamos las condiciones para que todo el que quiera trabajar, tenga dónde hacerlo. Cuando un padre o una madre regresa a casa con el cheque fruto de su labor honesta, es semilla de la estabilidad, del desarrollo y de la esperanza. Promoviendo luchas viciosas anti patronales, anti desarrollo, anti capitalismo y guerra de clases no se logra absolutamente nada. Crear condiciones optimas para la inversión en todos los niveles, promover el empresarismo, procurar buenas condiciones de empleo no pueden ser rehenes del pesimismo y el antagonismo de quienes todo lo critican y nada positivo proponen. La burocracia, la sobre regulación y la exigencia de muchas licencias que no aportan nada debe eliminarse. Debemos ubicar a Puerto Rico ante los ojos de quienes tienen el capital para invertir. El objetivo tiene que ser que el mundo entero vea a Puerto Rico como un lugar idóneo para vivir, trabajar, prosperar, invertir y ser felices.
Nuestra tarea como líderes no es administrar la escasez; sino generar abundancia. Por eso, desde el Senado, lideramos reformas para facilitar el ambiente de hacer negocios en Puerto Rico y buscamos hacer más fácil trabajar. Es eliminar los obstáculos para la inversión, es simplificar los procesos para nuestros empresarios –grandes y pequeños–, es garantizar la seguridad jurídica que atraiga capital y con él, ¡empleos, empleos y más empleos!
Cuando las fábricas abren sus puertas, cuando los comercios prosperan, cuando nuestros jóvenes encuentran plazas en su propio patio sin tener que mudarse buscando oportunidades, es entonces cuando se produce el verdadero impacto social. Es entonces cuando el dinero circula, cuando las familias se fortalecen, cuando el crimen retrocede y cuando el optimismo se contagia.
Fomentar el empleo, atraer la inversión y cultivar el espíritu emprendedor son las verdaderas políticas sociales que necesitamos. Esa es la visión de futuro que siempre ha promovido y sobre la cual Luis A Ferré fundó al PNP. Porque al final del día, el mejor programa social para Puerto Rico es y siempre será la oportunidad de un buen empleo.
El Hon. Thomás Rivera Schatz abogado y exfiscal, quien fue el decimocuarto, decimosexto y actualmente es el decimoctavo presidente del Senado de Puerto Rico. Además preside la Comisión de Innovación, Reforma y Nombramientos del Alto Cuerpo. Está afiliado al Partido Nuevo Progresista de Puerto Rico y al Partido Republicano de los Estados Unidos.