Amazon elimina libro falso sobre asesinato de Charlie Kirk que disparó teorías de conspiración
Un supuesto libro titulado The Shooting of Charlie Kirk fue publicado en Amazon con una fecha anterior a que ocurriera el tiroteo

Un misterioso libro titulado The Shooting of Charlie Kirk apareció brevemente en Amazon con fecha de publicación del 9 de septiembre de 2025, un día antes del ataque que terminó con la vida del activista conservador.
La anomalía encendió teorías conspirativas en redes sociales y llevó a Amazon a retirar el título de su listado de forma casi inmediata.
La compañía explicó que todo se debió a un “problema técnico” con las fechas de autopublicación y que el libro en realidad salió al mercado después del tiroteo. Sin embargo, el texto atribuido a una autora desconocida llamada Anastasia J. Casey, ya no está disponible en la plataforma.
El incidente rápidamente se convirtió en material para especulaciones y desinformación en redes. El medio especializado Reuters reportó que incluso algunos chatbots y buscadores de IA ofrecieron versiones inexactas o contradictorias sobre el supuesto libro y la tragedia, lo cual aumentó la confusión entre los cibernautas.
Autoridades como el gobernador de Utah, Spencer Cox, también advirtieron que grupos de desinformación y bots extranjeros aprovechan este tipo de episodios para sembrar caos. El mandatario pidió a la ciudadanía desconfiar de rumores virales y recurrir a fuentes oficiales y verificadas.
Este caso no es uno aislado y es solo un reflejo de los riesgos de la autopublicación digital y el impacto de supuestos errores técnicos, en un contexto donde las teorías conspirativas circulan más rápido que la verdad. La breve existencia del libro The Shooting of Charlie Kirk en el inventario de Amazon también pudiese ser uno de muchos ejemplos de fabricación de fuentes en la era digital.
Al aparecer con una fecha anterior al ataque en un portal tan reconocido como Amazon, aunque fuera por error técnico, dio la impresión de que existía información anticipada sobre el mortal ataque. Eso bastó para alimentar un sinnúmero de teorías conspirativas que, en segundos, fueron amplificadas en las redes sociales y algunas plataformas digitales.