Trump Firma Ley "TAKE IT DOWN" Contra Abuso Digital
Histórica ley impulsada por Melania Trump criminaliza "deepfakes" y "revenge porn", exigiendo su remoción. Fuerte apoyo bipartidista.

WASHINGTON D.C. – En una movida legislativa que diversos sectores a nivel nacional han calificado como histórica en la lucha contra la explotación digital, el Presidente Donald J. Trump firmó el pasado 19 de mayo de 2025 la ley TAKE IT DOWN Act (S. 146). Esta legislación, una iniciativa clave de la Primera Dama Melania Trump, establece nuevas y contundentes medidas para proteger a las víctimas de la publicación no consentida de imágenes íntimas, incluyendo las manipulaciones digitales conocidas como "deepfakes". La ley no solo tipifica como delito estas acciones bajo circunstancias específicas, sino que también impone a ciertas plataformas en línea la obligación de implementar procesos de notificación y eliminación de dicho contenido. El anuncio lo dio a conocer la Casa Blanca en un comunicado enviado por Correo Electrónico a INDIARIO.
La aprobación de esta ley, que tuvo lugar en el Congreso el 28 de abril de 2025, ha sido recibida con un amplio elogio bipartidista, tanto en el Capitolio como por parte de diversas organizaciones y defensores de los derechos de las víctimas. Mientras las prohibiciones criminales de la ley entraron en vigor de manera inmediata tras la firma presidencial, las plataformas digitales cubiertas por el estatuto tienen un plazo de un año, hasta el 19 de mayo de 2026, para establecer los mecanismos de notificación y remoción requeridos.
Contexto legal: La lucha contra la difusión no consentida de imágenes íntimas
Durante los últimos doce años, los estados de la unión americana han ido adoptando diversas leyes para abordar específicamente la distribución no consentida de imágenes íntimas, un problema a menudo referido como "pornografía no consentida" o "pornovenganza". A nivel federal, un paso importante se dio en 2022 cuando el Congreso, como parte de la reautorización de la Ley de Violencia Contra la Mujer (VAWA, por sus siglas en inglés), estableció un derecho de acción civil para las víctimas de pornografía no consentida. Esta ley generalmente autoriza a las personas representadas en las imágenes a demandar a la parte que las divulga en un tribunal federal, buscando una indemnización por daños y perjuicios o medidas cautelares.
Sin embargo, un área de creciente preocupación ha sido la proliferación de imágenes creadas o alteradas digitalmente, como los "deepfakes". Mientras algunas jurisdicciones, como Nueva York, ya incluían explícitamente estas imágenes manipuladas en sus leyes, la acción civil federal bajo VAWA, en su forma original, no las abordaba de manera directa. Esto dejaba una interrogante sobre si el derecho de acción de VAWA abarcaba tales representaciones modificadas digitalmente. En respuesta, miembros del Congreso introdujeron proyectos de ley en las legislaturas 118ª y 119ª para expandir la causa de acción existente o crear una paralela para imágenes creadas o alteradas mediante inteligencia artificial (IA) u otras tecnologías digitales. La TAKE IT DOWN Act llega para llenar este vacío y fortalecer el marco legal.
Profundizando en la "TAKE IT DOWN Act"
La ley, cuyo acrónimo significa "Tools to Address Known Exploitation by Immobilizing Technological Deepfakes on Websites and Networks Act" (Ley de Herramientas para Abordar la Explotación Conocida mediante la Inmovilización de Falsificaciones Digitales Tecnológicas en Sitios Web y Redes), introduce dos cambios principales en la legislación federal:
Nuevas prohibiciones criminales: Modifica la Sección 223 de la Ley de Comunicaciones de 1934 para añadir nuevas prohibiciones penales relacionadas con la publicación de imágenes íntimas.
Requisitos para plataformas cubiertas: Crea nuevas obligaciones para las "plataformas cubiertas", cuya aplicación estará a cargo de la Comisión Federal de Comercio (FTC).
Detalle de las prohibiciones criminales
La ley establece como ilegal, bajo ciertas circunstancias, que cualquier persona "utilice un servicio informático interactivo" – término existente que se interpreta ampliamente para cubrir la mayoría de las aplicaciones y servicios en línea – para "publicar a sabiendas" ya sea una "representación visual íntima" o una "falsificación digital" de un individuo identificable. Es importante notar que los términos "a sabiendas" y "publicar" no están definidos en la ley ni en el estatuto que modifica.
Una "representación visual íntima" se define por referencia al derecho de acción federal existente e incluye una representación visual de un individuo identificable involucrado en "conducta sexualmente explícita". Por su parte, una "falsificación digital" bajo esta ley es una representación visual íntima de un individuo identificable creada o alterada utilizando IA u otros medios tecnológicos. El "individuo identificable" es alguien "que aparece total o parcialmente en una representación visual íntima" y "cuyo rostro, semejanza u otra característica distintiva (incluyendo una marca de nacimiento única u otra característica reconocible) se muestra en conexión con dicha representación visual íntima".
Las prohibiciones criminales se desglosan en siete delitos separados:
Publicaciones que involucran representaciones visuales íntimas "auténticas" de adultos.
Publicaciones que involucran representaciones visuales auténticas de menores (menores de 18 años).
Publicaciones que involucran falsificaciones digitales de adultos.
Publicaciones que involucran falsificaciones digitales de menores.
Amenazas que involucran representaciones íntimas auténticas de adultos o menores.
Amenazas que involucran falsificaciones digitales de adultos.
Amenazas que involucran falsificaciones digitales de menores.
Dado que se trata de delitos penales, el gobierno tiene la carga de probar cada elemento más allá de una duda razonable.
Para los delitos relacionados con la publicación de representaciones de adultos, el gobierno debe demostrar que, además de publicar el material "a sabiendas", el acusado tuvo la intención de que la publicación causara daño, o que la publicación efectivamente causó daño al individuo identificable, "incluyendo daño psicológico, financiero o reputacional". Estos delitos también contienen elementos relativos al consentimiento y al contenido:
Que una representación visual íntima auténtica "fue obtenida o creada bajo circunstancias en las cuales la persona sabía o razonablemente debería haber sabido que el individuo identificable tenía una expectativa razonable de privacidad", o, en el caso de una falsificación digital, el material fue publicado sin el consentimiento del individuo identificable.
Que "lo representado no fue expuesto voluntariamente por el individuo identificable en un entorno público o comercial".
Que "lo representado no es un asunto de interés público".
El elemento de "interés público" parece referirse a un concepto de la Primera Enmienda. La Corte Suprema ha sostenido que el discurso trata sobre asuntos de interés público cuando puede "considerarse justamente como relativo a cualquier asunto de preocupación política, social o de otra índole para la comunidad", o cuando "es un tema de interés periodístico legítimo; es decir, un tema de interés general y de valor y preocupación para el público", independientemente de su "carácter posiblemente 'inapropiado o controvertido'". En el análisis de la Primera Enmienda, el discurso sobre asuntos de interés público generalmente recibe mayor protección.
Los delitos de publicación que involucran representaciones de menores no tienen los mismos elementos de consentimiento y contenido. La responsabilidad penal surge si el acusado publica a sabiendas las representaciones y tiene la intención de "abusar, humillar, acosar o degradar al menor" o "excitar o satisfacer el deseo sexual de cualquier persona".
La ley contiene excepciones para ciertos tipos de publicaciones, incluyendo divulgaciones de buena fe a las fuerzas del orden o "para un propósito médico, científico o educativo legítimo". No constituye delito que una persona posea o publique una representación visual íntima o falsificación digital de "sí misma involucrada en desnudez o conducta sexualmente explícita". El material que viola leyes específicas sobre explotación infantil también está excluido de la prohibición penal.
Adicionalmente, la ley tipifica como delito "amenazar intencionalmente" con cometer uno de los delitos relacionados con la publicación "con el propósito de intimidación, coerción, extorsión o para crear angustia mental".
Las sanciones por violar los delitos de publicación relativos a representaciones de adultos incluyen multas penales, prisión de hasta dos años, o ambas. Las penas por publicar representaciones de menores son mayores, con prisión potencial de hasta tres años. Las amenazas de publicar representaciones visuales auténticas conllevan las mismas penas que los delitos de publicación aplicables. La pena de prisión potencial para delitos relacionados con amenazas que involucran falsificaciones digitales no es superior a 18 meses, o 30 meses para amenazas que involucran a menores. La ley también prescribe la confiscación del material distribuido en violación de un delito relacionado con la publicación, así como de la propiedad utilizada para cometer la violación u obtenida como resultado de la misma.
Requisitos de notificación y eliminación para plataformas
La ley exige que las "plataformas cubiertas" establezcan un proceso específico de notificación y eliminación antes del 19 de mayo de 2026. Una "plataforma cubierta" es "un sitio web, servicio en línea, aplicación en línea o aplicación móvil" que sirve al público y que "principalmente proporciona un foro para contenido generado por el usuario" o publica, cura, aloja o pone a disposición contenido de representaciones visuales íntimas no consentidas en el curso normal de sus negocios. Se excluyen proveedores de acceso a internet de banda ancha, correo electrónico, y sitios web o aplicaciones que consisten principalmente en contenido preseleccionado por el proveedor y cuya funcionalidad interactiva es incidental. Esta última exclusión no aplica a quienes estén en el negocio de publicar o alojar representaciones íntimas no consentidas.
Bajo la ley, una plataforma cubierta debe establecer un proceso que permita a un individuo identificable (o su representante autorizado) notificar a la plataforma y solicitar la eliminación de una representación visual íntima de ese individuo publicada sin su consentimiento. La notificación debe ser por escrito e incluir identificación suficiente del material, una declaración de "buena fe" de que la publicación no es consentida, y la firma e información de contacto del solicitante. Al recibir dicha notificación, la plataforma debe eliminar la representación "tan pronto como sea posible", pero no más tarde de 48 horas, y hacer "esfuerzos razonables para identificar y eliminar cualquier copia idéntica conocida". Las plataformas deben explicar este proceso en lenguaje sencillo en su sitio y no serán responsables por la desactivación o eliminación de buena fe de material, incluso si resulta ser lícito.
La FTC está autorizada para hacer cumplir estos requisitos, considerando una "falta de cumplimiento razonable" como una violación de las reglas contra actos o prácticas desleales o engañosas (UDAP, por sus siglas en inglés), extendiendo su jurisdicción a organizaciones sin fines de lucro para este propósito.
Elogios bipartidistas y reacciones
La firma de esta ley crucial recibió un amplio reconocimiento. El Senador Ted Cruz la calificó como una "victoria histórica para las víctimas de pornovenganza y abuso de imágenes deepfake", añadiendo que "los depredadores que armamentizan la nueva tecnología (...) ahora enfrentarán consecuencias penales, y Big Tech ya no podrá hacerse de la vista gorda". Agradeció a la Primera Dama Melania Trump por su colaboración.
La Senadora Amy Klobuchar celebró la promulgación de "mi ley bipartidista TAKE IT DOWN Act", destacando que "protege a las víctimas de abuso en línea y establece algunas reglas para las redes sociales y la IA". También agradeció el apoyo de la Primera Dama.
La Representante Maria Elvira Salazar enfatizó el cambio que representa la ley: "Antes de esta ley, las víctimas eran ignoradas (...) Con TAKE IT DOWN, eso cambia. Las plataformas deben responder — y los depredadores enfrentarán la justicia".
Linda Yaccarino, CEO de X, expresó su honor por estar presente en la firma y agradeció la dedicación de la Primera Dama a la seguridad, afirmando que X continuará trabajando para hacer de internet un lugar más seguro.
El Fiscal General de Carolina del Sur, Alan Wilson, declaró: "Nadie debería tener que vivir con el temor de que sus momentos más privados sean utilizados como armas en su contra (...) Hoy, con el liderazgo del Presidente Trump, estamos llevando esa lucha al escenario nacional".
El Centro Nacional para Niños Desaparecidos y Explotados (NCMEC) agradeció al Presidente y a la Primera Dama por priorizar esta legislación, señalando que "esta nueva ley innovadora cierra una brecha peligrosa al dirigirse a la distribución de contenido explotador tanto real como alterado digitalmente que involucra a niños".
La Presidenta de la Organización Nacional de Mujeres (NOW), Christian F. Nunes, describió la ley como "la primera legislación bipartidista que se centra en una de las amenazas más perniciosas para la salud y seguridad de las mujeres: el robo de nuestra autonomía corporal a través de imágenes deepfake". Elogió la colaboración bipartidista.
Numerosos otros legisladores, incluyendo a los senadores Marsha Blackburn, Shelley Moore Capito, John Cornyn, Catherine Cortez Masto, Roger Wicker, Todd Young, y representantes como Tom Emmer, Lisa McClain, Nancy Mace y Brett Guthrie, entre muchos otros, expresaron su firme apoyo y satisfacción por la promulgación de la ley, destacando su importancia para proteger a niños, mujeres y todas las víctimas de la explotación digital y el abuso generado por IA. Figuras de la administración como la Ex Fiscal General Pam Bondi, el Secretario de Vivienda Scott Turner y la Administradora de Pequeñas Empresas Kelly Loeffler también se sumaron a los elogios.
Consideraciones legales y futuras
Como toda nueva legislación, la TAKE IT DOWN Act será objeto de interpretación por diversas partes interesadas. Podrían surgir interrogantes sobre el significado exacto de términos como "publicar". Si un tribunal debe decidir esto, podría recurrir al significado ordinario del término, que generalmente implica una difusión al público, lo que podría excluir mensajes directos a una sola persona, aunque la jurisprudencia no es unánime. La "regla de lenidad", que resuelve ambigüedades en estatutos penales a favor del acusado, también podría entrar en juego.
Aunque la ley no modifica VAWA directamente, los tribunales podrían considerarla relevante para decidir si el derecho de acción civil de VAWA aplica a las falsificaciones digitales. La distinción que hace la TAKE IT DOWN Act entre "representaciones visuales íntimas" y "falsificaciones digitales" en sus disposiciones penales, pero no en las de notificación y remoción ni en VAWA, podría llevar a diferentes interpretaciones judiciales.
Otro aspecto importante será el alcance de la responsabilidad para las plataformas en línea. La Sección 230 de la Ley de Comunicaciones generalmente inmuniza a los servicios informáticos interactivos por contenido de terceros. La TAKE IT DOWN Act no aborda explícitamente la relación con la Sección 230, aunque protege a las plataformas por la eliminación de buena fe. Las plataformas podrían invocar la Sección 230 como defensa ante acciones de la FTC, mientras que la FTC podría argumentar que la nueva ley deroga implícitamente la Sección 230 para estas violaciones. El derecho penal federal está explícitamente excluido de la protección de la Sección 230, pero la TAKE IT DOWN Act ofrece una defensa si una persona "únicamente... proporcionó acceso o conexión", aunque esta defensa tiene sus limitaciones y su alcance en la infraestructura en línea actual está por verse. La prueba del estado mental ("a sabiendas") también será crucial en casos penales contra proveedores.
Finalmente, al regular el discurso basado en su contenido (representaciones sexualmente explícitas), es probable que surjan impugnaciones bajo la Primera Enmienda, que podrían someter la ley al escrutinio más riguroso (escrutinio estricto). Los tribunales podrían considerar decisiones sobre leyes estatales similares, muchas de las cuales han sido confirmadas, en parte debido a requisitos rigurosos de estado mental y excepciones para asuntos de interés público o donde no hay expectativa razonable de privacidad.
La promulgación de la TAKE IT DOWN Act representa un esfuerzo significativo y concertado para abordar una forma moderna y dañina de abuso. Con el liderazgo de la Primera Dama Melania Trump y el respaldo bipartidista, esta ley busca ofrecer a las víctimas nuevas herramientas de protección y llevar ante la justicia a quienes perpetran estos actos, adaptando el marco legal a los desafíos de la era digital y la inteligencia artificial.